¿Qué comer? - ayto-tineo
La Gastronomía en Tineo
La gastronomía en Tineo tiene una buena tradición chacinera y calidad en sus embutidos, a la vez que es un buen cartel de presentación. Pero no sólo encontramos en Tineo embutidos, sino una amplia oferta culinaria, en la que incluimos los embutidos, pero también una gama de platos de los derivados del cerdo y los tradicionales postres y potes asturianos que en Tineo tienen un toque especial y personal.
El Concejo de Tineo se caracteriza por su gastronomía, anfitriona improvisada que queda impresa en la retina y el paladar. La cocina tinetense se fundamenta en potajes y embutidos (chorizo, morcilla, lomo, butietso, andoya...), sin olvidar la importancia que tienen las hortalizas y verduras, los postres, la caza o las truchas de nuestros ríos. Los potes o potajes se aligeran y equilibran manteniendo siempre la honestidad y la personalidad que los distingue. No obstante ha sido durante décadas, la base de sustento que ha borboteado en las cazuelas y pucheros de todo el concejo, especialmente en los duros meses de invierno. Pote de berzas, de arbeyos o de caxinas, toda una variedad casi siempre acompañado del compango y el butietso.
Los ingredientes de estos potes provienen mayoritariamente de las excelentes huertas diseminadas por toda la geografía tinetense, que, pese a ser de autoconsumo, los obrantes o excedentes pueden adquirirse en las ferias o mercados.
Dentro de los cárnicos, el cerdo (aquí llamado gocho) y los embutidos son numerosos y variados. Tineo sorprende por el excelente aprovechamiento del cerdo a la hora de hacer la matanza, y así contamos, además del jamón, chorizos y morcillas, con la tsinguaniza, las andoyas, el butietso y el producto estrella, el chosco, que ahora puja por una IGP propia.
Tradicional de carnaval es la caramietsa. De esta tradición surge una pujante industria agroalimentaria que ha sabido combinar las modernas tecnologías con el saber hacer tradicional, ofreciendo al visitante la posibilidad de adquirir estos exquisitos productos.
La excelente calidad de nuestras reses proporciona carne de gran calidad, disfrutada en guisos y parrilladas tanto al aire libre como en los comedores de nuestros restaurantes. Añadido a ello, la caza, además de constituir un deporte tradicional, ancestralmente sirvió de sustento alimentario. Esta costumbre no se ha perdido, y hoy se degustan menús gastronómicos basados en la caza de gran estima: jabalí, corzo, venado...
De sus extensos bosques autóctonos se pueden conseguir exquisitas castañas, nueces, avellanas...y numerosas variedades de setas, siendo la estación privilegiada para las recolecciones el otoño. Lugar idóneo también para los truébanos (colmenas), que ayudan a disfrutar de una miel de sabor exquisito.
Las chambionadas (postres o elaboraciones dulces) cuentan con variedades que van desde el arroz con leche a las natas vaqueiras y la tseite tiesta, sin olvidar los frixuelos o la tarta elaborada con los mismo, o el bizcocho borracho de almendra